Dubito, ergo cogito, ergo sum
Descartes






miércoles, 11 de junio de 2008

REFLEXIONES DE CARLOMAGNO*

Por ser ricos e hijos de nobles creeis que vuestra riqueza y vuestro nacimiento en una casa noble son suficientes, y que no tenéis necesidad de los estudios que os darían tanto honor. Sólo pensáis en vestidos, juegos y placeres; pero yo os digo que no concedo ninguna importancia a esa nobleza y esa riqueza que tanto estimáis. Si no os ocupáis de inmediato en el estudio, antes de que os perdáis en la frivolidad, nunca obtendréis nada de Carlos. A pesar de que es mejor hacer que saber, sin embargo es necesario saber para poder hacer. Por lo tanto pido a los obispos que no descuiden el estudio de las ciencias…

Autógrafo de Carlomagno
El emperador sólo dibujaba
el cuadrado central, completando
el resto sus secretarios.
Tomado de: "Historia 1" ; Ediciones SM; Pablo Escalante Gonsalbo, Estela Roselló.

*Carlomagno (en latín, Carolus Magnus, ‘Carlos el Grande’, 742-814), rey de los francos (768-814) y emperador de los romanos (800-814), condujo a sus ejércitos francos a la victoria sobre otros numerosos pueblos, y estableció su dominio en la mayor parte de Europa central y occidental. Fue el rey más influyente en Europa durante la Edad media.
A pesar de ser uno de los grandes gobernantes europeos y de ser muy capaz en el uso de armas y la diplomacia, su padre Pipino no se había interesado en su educación, sino sólo por su entrenamiento militar y conocimiento político. Por ello, Carlomagno no sabía leer ni escribir y tampoco sabía aritmética, por lo que desde niño fue apodado "el Palurdo". Consciente de que la ignorancia que campeaba en su corte era un obstáculo importante para la administración de sus dominios, fundó en su corte la primera escuela del Reino franco, buscando con ello encender una pequeña luz de saber sobre la oscuridad que se cernía sobre la Europa de esos dias. Para ello importó profesores desde Inglaterra, especialmente al fundador de la Universidad de York. A su muerte este intento quedaría extinto.

1 comentario:

BlueFury dijo...

Sin duda cultivarnos es lo que nos hace crecer (y no hablo de regar ni de abonar). Las grandes personalidades lo son por algo, y no siempre por infundir temor.
Gracias por tus palabras en este tu blog, y en el mío. Un abrazo.