Dubito, ergo cogito, ergo sum
Descartes






jueves, 5 de octubre de 2017

HOY ES JUEVES

Hace varios años pertenecí a un grupo de bloggeros que publicábamos cada jueves con un título determinado. Resultó una experiencia divertida, apasionante y todo un reto, al menos para mi.
Hoy recordé eso y quise publicar este jueves luego de ir por ahí, y buscando, queriendo o no, los desastres del sismo del 19 de septiembre.
Los encontré. Y me dio tristeza.
Y me di cuenta que lo que a mi me pasó, no fue nada. ¿y qué me pasó? Pues que se cayeron los libreros y todo lo que en ellos había. La verdad cuando los ví me sentí muy apesadumbrada. Tanto, que no fue sino hasta el día siguiente que empecé a recoger. También se cayeron cosas de vidrio en el pasillo de la casa; eso fue menos duro: simplemente tomé la escoba y barrí pensando "lo que no se sostuvo en su lugar, pues se tiene que ir a la basura". Y ya.
Hoy ví un edificio, el de la Papelera Dabo, dañado. Y cerradas todas sus entradas con grandes tablones de madera. Recorrí mentalmente un lugar al que mucho fui: desde a comprar un lápiz hasta cajas de papel para la fotocopiadora. Recorría con gusto sus pasillos viendo sus papeles, tocándolos, hojeando sus cuadernos o libretas, revisando sus frasquitos de pinturas, o sus estantes llenos de pegamentos, bolígrafos, folders, clips de todos tamaños, lápices de colores, plumones y mucha papelería más.
Pero también ví que mucha gente se ha reintegrado a su cotidianeidad más rápido que aprisa. ¡Qué bueno! porque eso de estar acordándose de los desastres como que no es muy correcto. Simplemente hay que tomar lo bueno de esto y es con lo que yo me quedo: ver lo bueno de seguir adelante, ofrecer lo que uno tiene sin pedir nada a cambio, sonreir más, quejarse menos y hacer lo posible por completar y terminar lo que se empieza.
Y dentro de esas cosas, decidí volver a leer mi novela: ésa que me propuse leer al iniciar este año (una por mes). Ya la tengo. Ya empecé. No es muy grande. Pero es una novela sobre la vida de una mujer durante la Revolución. A ver qué tal está. Espero que buena. Lo que he leído me ha gustado.
 

martes, 3 de octubre de 2017

¿DÓNDE TE AGARRÒ EL TEMBLOR?

Es la pregunta que todos nos hemos hecho en el mes de septiembre. 
Primero el 7 y luego el 19.  Y parece que no hubiera otra conversación a la que se vuelve por enésima vez.
Y luego empezamos a decir que no podemos dormir, o que cada rato se siente uno mareado, o que pensamos que el plafón se movió, o cosas semejantes. Y luego preguntamos sobre el estres postraumático y oímos y ejercitamos técnicas para superarlos.
Y revisamos nuestra casa, y repasamos con la vista, aunque sea muy disimuladamente, los sitios en donde estamos y a veces hasta por donde caminamos. Y ya no se diga, pasamos por los lugares donde hay un edificio, casa, negocio o barda "colapsado".
Pero ¿ya revisamos un manual que hay por ahí en internet que dice "Sismos: saber qué hacer" Esto es; qué hacer antes del sismo, durante el sismo, y después del sismo, o sea, cuando ya ha terminado. Y practicarlo realmente.
Y te pones a oir la canción de Chico Che y la Crisis "¿Dónde te agarró el Temblor?"