Dubito, ergo cogito, ergo sum
Descartes






lunes, 31 de diciembre de 2012

PROPÓSITOS DE AÑO NUEVO

Al finalizar el año, hace uno recuento de lo bueno y malo.
Bueno, en realidad no todos lo hacen. Pero sí la mayoría de la gente que conozco revisa su pasado inmediato (un año) e intenta enmendar lo mal hecho y se plantea propósitos.Que a veces a fuerza de ser tantos, ni uno solo cumple, o los medio cumple, o se olvidan pasados los primeros treinta días (ya no se diga cuando ya van 260 o más días...)
Yo he hecho recuento de este año que está finalizando y he de escribir que el dichoso recuento lo empecé desde inicios de diciembre por aquéllo de que se acababa la era el día 21 (¡y que no pasó nada! Bueno, al menos yo no percibí nada) 
Así es que haciendo revisiones,llegué a una conclusión: no hacer propósitos de Año Nuevo.
Y a ver cómo me va.
Felicidades a quien me lea.

jueves, 27 de diciembre de 2012

JOHANNES KEPLER

El 27 de Diciembre de 1571 nació en Weil der Stadt, Alemania, Johannes Kepler.
Nacido en el seno de una familia luterana, estudió ética, dialéctica, retórica, griego, hebreo, astronomía y física, y más tarde, teología. 
En 1596 Kepler escribió un libro en el que exponía sus ideas. Mysterium Cosmographicum (El misterio cósmico). Siendo un hombre de gran vocación religiosa, Kepler veía en su modelo cosmológico una celebración de la existencia, sabiduría y elegancia de Dios. Escribió: «yo deseaba ser teólogo; pero ahora me doy cuenta a través de mi esfuerzo de que Dios puede ser celebrado también por la astronomía».
En 1602, a la muerte de Tycho Brahe, Kepler consiguió el acceso a todos los datos recopilados por Tycho sobre sus observaciones planetarias, que de hecho, eran mucho más precisos que los manejados por Copérnico. A la vista de los datos, especialmente los relativos al movimiento retrógrado de Marte se dio cuenta de que el movimiento de los planetas no podía ser explicado por su modelo de poliedros perfectos y armonía de esferas. Kepler, hombre profundamente religioso, incapaz de aceptar que Dios no hubiera dispuesto que los planetas describieran figuras geométricas simples, se dedicó con tesón ilimitado a probar con toda suerte de combinaciones de círculos. Cuando se convenció de la imposibilidad de lograrlo con círculos, usó óvalos. Al fracasar también con ellos, empleó elipses. Con ellas desentrañó sus famosas tres leyes (publicadas en 1609 en su obra Astronomia Nova) que describen el movimiento de los planetas. 
Dichas leyes, que asombraron al mundo, le revelaron como el mejor astrónomo de su época, aunque él no dejó de vivir como un cierto fracaso de su primigenia intuición de simplicidad (¿por qué elipses, habiendo círculos?). 
La Tres Leyes de Kepler son:
1) Los planetas tienen movimientos elípticos alrededor del Sol, estando éste situado en uno de los 2 focos que contiene la elipse.
2) Las áreas barridas por los radios de los planetas, son proporcionales al tiempo empleado por éstos en recorrer el perímetro de dichas áreas.
3) El cuadrado de los períodos de la órbita de los planetas es proporcional al cubo de la distancia promedio al Sol.
Supernova SN1604
(también llamada Estrella de Kepler)

Texto e imágenes tomadas de Wikipedia

lunes, 24 de diciembre de 2012


Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla todo el año.
                                                        Ch. Dickens
                                                                                           



La Adoración de los Magos; Rubens; 1609


lunes, 17 de diciembre de 2012

SUPONGO QUE LAS COSAS PASAN

...y que siguen igual.
Y que no caigo en la cuenta de que todos, absolutamente todos, cambiamos.
Evolucionamos, diría un cuate que conozco.
Después de no escribir por este sitio en tanto tiempo, encuentro que no todos aquellos blogueros con los que alguna vez estuve en contacto, siguen publicando. Pues, no, parece que se les ha olvidado.
O parece que están en otras cosas, o que ya no tienen tiempo, o ganas o inspiración. Sus entradas son cada vez más esporádicas (así como las mías).
Volver a publicar es un derecho que se me había pasado de largo. 
Es una obligación impuesta a mí misma, por mí misma para utilizar el lenguaje y aprender la tecnología. Y tal vez, si es posible, saber que los otros me pudiesen visitar.
Aquí sigo, no igual, pero aquí sigo, intentando rescatar de mi más íntimo ser esa chispa que me hacía pensar y pensar en temas sobre los que pudiera publicar. 
Quizá una de mis propósitos de Año Nuevo sea volver a publicar.

sábado, 3 de noviembre de 2012

UNA FLOR


(de planetacurioso.com)www.planetacurioso.com

lunes, 15 de octubre de 2012

THE POWER OF WE

En el Blog Action Day el tema sobre el que hay que publicar es éste que ahora he puesto en inglés, así como lo recibí en la invitación que me mandaron.
Traducido como "El Poder de Nosotros" (o "El Poder de la Unión") lo entiendo como la fuerza que tiene una persona al unirse a otras y lograr objetivos comunes. Esto le vemos cuando jugamos en equipos, o cuando tenemos que presentar una tarea en grupo o nos unimos hasta para limpiar la casa. 
La fuerza de muchos logra no sólo hacer las cosas más rápido sino a veces, incluso mejor, pues cada quien hará lo que mejor le sale, o lo que hace con más gusto en beneficio colectivo y obteniendo así una satisfacción personal.
El trabajo de varios para conseguir causas comunes se puede ver reflejado en casa, en la escuela, en el trabajo, en la colonia, en la ciudad, en el territorio nacional o en lugares tan apartados de donde se vive como el Ártico o la selva del Amazonas. Hay muchas causas nacionales e internacionales. O causas que a veces no rebasan el ámbito comunitario pero que logran cambios verdaderos. Y el primer cambio no es, como pudiéramos pensar, el objetivo común. No, el primer cambio es a nivel personal, en el momento que cada quien decide participar y poner una parte para conseguir el todo. Lo demás se da por añadidura.
Deberemos pensar en trabajar más a nivel colectivo abandonando nuestro discurso egoísta.
Deberemos ver más a los otros para conseguir lo que personalmente nos costaría más tiempo o esfuerzo lograr.
Deberemos actuar convencidos de que el Poder de Nosotros consigue más que cualquier otra cosa 

jueves, 4 de octubre de 2012

DÍA MUNDIAL DE LOS ANIMALES




Yo creo que los hombres continuarán matándose y torturándose 
los unos a los otros mientras maten y torturen  
a los animales. También  habrá guerras porque 
hay que entrenar y perfeccionar la matanza en 
objetos más pequeños, moralmente y técnicamente.
Edgar Kupfer-Koberwitz
(Prisionero del Campo de Dachau, 1940)
                                                                                                                                                                                           

Hoy en la tarde, cuando iba pasando por un kinder, me enteré que es el Día Mundial de los Animales. En un muro junto a la entrada estaba puesto ese título y se pegaron unos dibujos de los niños en alusión a este día.
Ya sabía yo que existía esta conmemoración, pero no sabía cuándo era y por qué se hacía.
Buscando encontré que existe la Declaración Universal sobre Bienestar Animal (DUBA) y al leerlo me entero que hay países y organizaciones a nivel mundial que apoyan este proyecto. México no se encuentra en estos listados.
También leí sobre los Derechos de los Animales, y las distintas corrientes en torno a ello. Muy interesante todo lo leído y que me movió a la reflexión en torno a estos seres que como humanos hemos domesticado (algunos) y de los cuales nos servimos (para comer, para la investigación, para la diversión). Y también mueve a la reflexión el hecho de que en nuestros afanes de éxito como especie en este planeta, hemos despojado a muchos animales de sus hábitats.
Hoy he aprendido mucho más en torno a estos seres que forman parte de nuestras vidas y agradezco que al menos en mi vida, algunos animales me hayan alegrado muchos, pero muchos días.

sábado, 1 de septiembre de 2012

NEIL ARMSTRONG

El sábado 25 de agosto de 2012 murió el primer hombre que pisó la Luna, Neil Armstrong.
Tenía 82 años.
Fue él quien dijo aquella frase "Es un pequeño paso para el hombre; un gran salto para la humanidad"al  poner su pie en la polvosa superficie de la Luna y dejar ahí su huella, para siempre.
Pero su huella no sólo quedó ahí, sino también en la mente de mucha gente. Y quedó tan firmemente marcada que no lograron olvidar el hecho, aunque no lo hayan presenciado realmente.
Me entristece saber de esta muerte, pero me quedo con las palabras de su familia: "En nuestro duelo por haber perdido a un muy buen hombre, también celebramos su ejemplar vida y esperamos que sea un ejemplo para los jóvenes de todo el mundo para que trabajen duro para hacer sus sueños realidad, que estén dispuestos a explorar y a llegar hasta el límite, y que sin egoismo sirvan a una causa mucho más grande que ellos mismos".
Descanse en paz.

jueves, 30 de agosto de 2012

NECESITO POCO



Me enviaron esto que transcribo, y a decir verdad, me ha resultado muy conmovedor. 
He pensado muy seriamente que vale la pena seguir este ejemplo, aunque a veces cueste trabajo
Desgraciadamente este artículo no tiene fecha, pero pienso que eso no importa 
(Artículo publicado en La Vanguardia, escrito por la periodista Angeles Caso)
Será porque tres de mis más queridos amigos se han enfrentado inesperadamente estas Navidades a enfermedades gravísimas. O porque, por suerte para mí, mi compañero es un hombre que no posee nada material pero tiene el corazón y la cabeza más sanos que he conocido y cada día aprendo de él algo valioso. O tal vez porque, a estas alturas de mi existencia, he vivido ya las suficientes horas buenas y horas malas como para empezar a colocar las cosas en su sitio. Será, quizá, porque algún bendito ángel de la sabiduría ha pasado por aquí cerca y ha dejado llegar una bocanada de su aliento hasta mí. El caso es que tengo la sensación -al menos la sensación- de que empiezo a entender un poco de qué va esto llamado vida.
Casi nada de lo que creemos que es importante me lo parece. Ni el éxito, ni el poder, ni el dinero, más allá de lo imprescindible para vivir con dignidad. Paso de las coronas de laureles y de los halagos sucios. Igual que paso del fango de la envidia, de la maledicencia y el juicio ajeno. Aparto a los quejumbrosos y malhumorados, a los egoístas y ambiciosos que aspiran a reposar en tumbas llenas de honores y cuentas bancarias, sobre las que nadie derramará una sola lágrima en la que quepa una partícula minúscula de pena verdadera. Detesto los coches de lujo que ensucian el mundo, los abrigos de pieles arrancadas de un cuerpo tibio y palpitante, las joyas fabricadas sobre las penalidades de hombres esclavos que padecen en las minas de esmeraldas y de oro a cambio de un pedazo de pan.
Rechazo el cinismo de una sociedad que sólo piensa en su propio bienestar y se desentiende del malestar de los otros, a base del cual construye su derroche. Y a los malditos indiferentes que nunca se meten en líos. Señalo con el dedo a los hipócritas que depositan una moneda en las alcancías de las misiones pero no comparten la mesa con un inmigrante. A los que te aplauden cuando eres reina y te abandonan cuando te salen pústulas. A los que creen que sólo es importante tener y exhibir en lugar de sentir, pensar y ser.
Y ahora, ahora, en este momento de mi vida, no quiero casi nada. Tan sólo la ternura de mi amor y la gloriosa compañía de mis amigos. Unas cuantas carcajadas y unas palabras de cariño antes de irme a la cama. El recuerdo dulce de mis muertos. Un par de árboles al otro lado de los cristales y un pedazo de cielo al que se asomen la luz y la noche. El mejor verso del mundo y la más hermosa de las músicas. Por lo demás, podría comer patatas cocidas y dormir en el suelo mientras mi conciencia esté tranquila.
También quiero, eso sí, mantener la libertad y el espíritu crítico por los que pago con gusto todo el precio que haya que pagar. Quiero toda la serenidad para sobrellevar el dolor y toda la alegría para disfrutar de lo bueno. Un instante de belleza a diario. Echar desesperadamente de menos a los que tengan que irse porque tuve la suerte de haberlos tenido a mi lado. No estar jamás de vuelta de nada. Seguir llorando cada vez que algo lo merezca, pero no quejarme de ninguna tontería. No convertirme nunca, nunca, en una mujer amargada, pase lo que pase. Y que el día en que me toque esfumarme, un puñadito de personas piensen que valió la pena que yo anduviera un rato por aquí. Sólo quiero eso. Casi nada. O todo.

lunes, 27 de agosto de 2012

DEL TRÓPICO

(Fragmento)

¡Qué alegre y fresca la mañanita!
Me agarra el aire por la nariz,
los perros ladran, un niño grita
y una muchacha gorda y bonita
sobre una piedra muele maíz.

Un mozo trae por un sendero
sus herramientas y su morral;
otro, con chanclas y sin sombrero,
busca una vaca con su ternero
para ordeñarla junto al corral.

Y la patrona, bate que bate,
me regocija con la ilusión
de una gran taza de chocolate
que ha de pasarme por el gaznate
con las tostadas y el requesón.
                                                                                                          Rubén Darío

domingo, 22 de julio de 2012

HOY ES EL DÍA DEL PERRO


Grandes, pequeños y de todos colores, tienen en común la fidelidad y entrega a sus dueños; los perros celebran este domingo su día y enfrentan una realidad contrastante, en la ciudad de México.
 
Los perros cuidan, ayudan en terapias, dan compañía, sirven de apoyo a personas con debilidad visual o ceguera, quienes dependen del can para moverse con mayor confianza.
Su olfato agudo les sirve para apoyar a labores detección de productos o materiales prohibidos en aeropuertos y para encontrar personas en zona de desastre.
Pese a su fidelidad y adaptación, muchos sufren maltrato o son abandonados, de acuerdo a cifras oficiales, sólo uno de cada diez perros callejeros es reclamado.
La Secretaría de Salud del Distrito Federal indica que hay un millón 200 mil canes en el DF, de los cuales 120 mil viven en la calle.
Los perros adaptaron a la vida de los humanos y el ritmo de vida, en las grandes urbes, provoca que los dueños pasen menos tiempo con las mascotas, esta es la razón del aumento de servicios como Spa's caninos, a los que acuden los dueños para compensar la falta de atención.
(Fotos: Tanya Guerrero/EL UNIVERSAL)
























Tomado de http://www.eluniversaldf.mx/home/nota48738.html

jueves, 12 de julio de 2012

MIGUEL ÁNGEL DE QUEVEDO

Éste es el nombre de una de las avenidas más hermosas de la Ciudad de México, en Coyoacán.
Relativamente corta en extensión, tiene un camellón ancho, de los pocos disfrutables en esta ciudad. Con fuentes, esculturas, plantas, árboles, esta avenida invita no sólo a circular sobre ella, sino también a caminarla.
Pero hablo de esta avenida porque hoy, 12 de julio, se festeja en México el Día del Árbol. Y es precisamente el Ing. Miguel Ángel de Quevedo, llamado el Apóstol del Árbol, a quien se dedica esta hermosa vialidad.
Según leí, fue este hombre, nacido en una prominente familia mexicana de finales del Siglo XIX, quien con su ahínco, y aprovechando sus relaciones con José Ives Limantour, ministro de Hacienda de Porfirio Díaz, amplió los viveros forestales que él había establecido en Coyoacán (ahora llamados Viveros de Coyoacán) y logró también que Díaz se entusiasmara con su proyecto y acordara que el gobierno debía apoyar su proyecto. Quevedo, en el 2º. Congreso Internacional sobre Higiene Pública que se llevó a cabo en Berlín en 1907, escuchó con atención a los delegados que recomendaban la cración de zonas forestales protegidas alrededor de las ciudades.
Presentó varios proyectos conservacionistas forestales a Díaz, luego a Madero, a Huerta (a quien no le interesaron), a Carranza (a quien convenció de establecer al Desierto de los Leones como el primer parque nacional de México), y después de varios años de ardua y diversa labor, encabezó el Comité Mexicano para la Protección de las Aves Silvestres (1931), aunque su principal preocupación fue siempre la conservación de los bosques. Cárdenas lo invitó a encabezar el Departamento Autónomo Forestal,  de Pesca y Caza.
Miguel Ángel de Quevedo murió el 15 de Julio de 1946. Pocas personas saben quién es. Muchas personas reconocen su nombre, pero sólo como el de una avenida en la Ciudad de México


Foto: Miguel Ángel de Quevedo, circa 1930

domingo, 1 de julio de 2012

LA GUERRA DE LOS MUNDOS

Estoy frente al televisor, esperando... veo los comerciales y me resisto a tomar el control para cambiar de canal y así escuchar los comentarios de los analistas políticos.
Así es que he preferido instalarme en el canal que pasa la película "La Guerra de los Mundos", protagonizada por Tom Cruise. Me emociono deveras. 
Y luego pienso que ya había yo librado una batalla personal a la hora de ir a votar. Pues con tantas boletas que me dieron (seis en el D.F.) y tantas instrucciones para votar, fue realmente un triunfo personal no hacerme bolas y emitir de forma correcta mi voto.
La verdadera guerra está entre estos cuatro.

Créditos: Fotos de candidatos: studiof12.com,  imágenes de lasBoletas Electorales,  imágenes de la película "La Guerra de los MUndos": zone-ufo.com

lunes, 25 de junio de 2012

UN POCO DE TIEMPO LIBRE

Eso es lo que necesito: tiempo libre para hacer las muchas cosas que no puedo hacer libremente porque el trabajo es tanto que sólo a él puedo atender.
Y una de las cosas que ahora tengo es eso, tiempo libre.
Y lo reparto entre un poco de limpieza en casa, reacomodar los libros, cocinar, leer lo atrasado, contestar los mails, hablar por teléfono con los amigos para hacer citas y vernos, ver tele, leer cosas a través de la computadora, estar en el jardín con mis perros, oir a los pajaritos, imaginar lo que harán otros, bordar, escribir en el blog.





Así que el tiempo libre, se vuelve a ocupar. ¡Qué paradójico!
No importa, porque si no fuera por eso, difícilmente estaríamos a gusto con nosotros mismos.

sábado, 23 de junio de 2012

EL JUEGO DE AJEDREZ

Hace un rato abrí un mail con unas imágenes muy bonitas. Una de ellas es ésta






y recordé a dos buenos amigos a los que les gusta jugar ajedrez. Sé que si vieran esta imagen les iba a causar gracia.
Ambos amigos han intentado que yo juegue ajedrez. 
A mí no me gusta este juego, la verdad. Pero no descarto la idea de que es bueno aprenderlo y que lo hace a uno pensar y pensar y también aceptar la derrota porque reconoces cuando el otro te gana, que ha sido realmente mejor que tú, por cualquier causa, pero que ha sido mejor.



martes, 15 de mayo de 2012

LUGARES STARLIGHTS

Ya había yo leído algo en torno a esto, alguna vez.
Ya lo había comentado también con alguien.
Ahora me entero con más elementos sobre un derecho que le estamos quitando a nuestros descendientes: el derecho a ver el cielo nocturno. Y les hemos estado quitado, poco a poco este derecho por la gran cantidad de iluminación que tenemos en nuestras ciudades. Por el derroche que hemos hecho de la luz en nuestras casas y oficinas y lugares de esparcimiento.
Me parece que sí es importante devolver este derecho: el de mirar el cielo estrellado y devolver así los elementos que esto mismo lleva consigo: el imaginar, el soñar en algo lejano a nosotros, en "palpar" la oscuridad y disfrutar de ella.


Incluyo aquí la:

Declaración Mundial en Defensa del Cielo Nocturno y el Derecho a Observar las Estrellas

sesionfinal
Los participantes de la Conferencia Internacional en Defensa de la Calidad del Cielo Nocturno y el Derecho a Observar las Estrellas, conjuntamente con los representantes de la UNESCO, OMT, IAU, y otras agencias y organizaciones internacional citadas en la versión íntegra de la Declaración, así como miembros de la comunidad científica y académica, reunidos en La Palma, Islas Canarias, España, el 20 de Abril de 2007; siendo conscientes que la visión de la luz de las estrellas ha sido y es una inspiración para toda la Humanidad, y que su observación ha representado un elemento esencial en el desarrollo cultural y científico de todas las civilizaciones; 

Declaramos que: 

a. El derecho a un cielo nocturno no contaminado que permita disfrutar de la contemplación del firmamento, debe considerarse como un derecho inalienable de la Humanidad, equiparable al resto de los derechos ambientales, sociales y culturales. La progresiva degradación del cielo nocturno ha de ser considerada como un riesgo inminente que conlleva la pérdida de un recurso fundamental.

b. El conocimiento, apoyado en la educación, constituye la clave que permite integrar la ciencia en nuestra cultura actual, contribuyendo al avance de toda la Humanidad. La difusión de la astronomía y de los valores científicos y culturales asociados deberán considerarse como contenidos básicos a incluir en la actividad educativa. 

c. El control de la contaminación lumínica debe ser un requisito básico en las políticas de conservación de la naturaleza dado  el impacto  que genera sobre muchas especies, hábitats, ecosistemas y paisajes.

d. La protección de la calidad astronómica de las áreas privilegiadas para la observación científica del universo deberá constituir una prioridad en las políticas medioambientales y científicas de carácter regional, nacional e internacional. 

e. Ha de promoverse el uso racional de la iluminación artificial, minimizando el resplandor que provoca en el cielo y evitando la nociva intrusión del exceso de luz sobre los seres humanos y el medio natural.  Esta estrategia implica un uso más eficiente de la energía en consonancia con los acuerdos sobre el cambio climático y la protección del medio ambiente..

f. Al igual que otras actividades, el turismo puede convertirse en un poderoso instrumento para desarrollar una nueva alianza en favor de la calidad del cielo nocturno. El turismo responsable, en todas sus manifestaciones, puede y debe integrar el paisaje del cielo nocturno como un recurso a resguardar y valorar en todos los destinos. 

Deberán ponerse en práctica todas las medidas necesarias con el fin de informar y sensibilizar al conjunto de implicados en la protección del medio ambiente nocturno, ya sea a nivel local, nacional, regional o internacional, sobre el contenido y los objetivos de la Conferencia Internacional en Defensa de la Calidad del Cielo Nocturno y el Derecho a Observar las Estrellas celebrada en la Isla de La Palma..

Adoptada el 20 Abril de 2007, en La Palma, Islas Canarias, España.


domingo, 29 de abril de 2012

LO NUEVO
No puedo hacer nada en mi blog porque mi navegador "ya no es compatible".
Y aunque he hecho y cargado lo que se me pide, sigo con el mismo problema.
Y ahora ¿quién podrá salvarme...?
Esta ventana, donde ahora escribo, no me presenta los estilos de las letras, los tamaños de las mismas, los colores, los vínculos y un montón de cosas más que antes sí presentaba.
Me da cosa ser tan ignorante en esto de la computadora...

jueves, 19 de abril de 2012

¡LIBROS! ¡LIBROS!

No sólo de pan vive el hombre.
Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio del Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.
Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansias de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita, ¿y dónde están esos libros?
¡Libros! ¡libros! He aquí una palabra mágica que equivale a decir: "amor, amor", y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso, Fedor Dostoievski, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita, pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: "¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que alma no muera!". Tenía frío y no pedía fuego, tenía sed y no pedía agua, pedía libros, es decir horizontes, es decir escaleras para subir a la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o fría, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.
Nadie se da cuenta al tener un libro en las manos, el esfuerzo, el dolor, la vigilia, la sangre que ha costado. El libro es sin disputa la obra mayor de la humanidad. Muchas veces el pueblo está dormido como el agua de un estanque en día sin viento. Ni el más leve temblor turba la ternura blanda del agua. Las ranas duermen en el fondo y los pájaros están inmóviles en las ramas que lo circundan. Pero arrojad de pronto una piedra. Veréis una explosión de círculos concéntricos, de ondas redondas que se dilatan atropellándose unas a las otras y se estrellan contra los bordes. Veréis un estremecimiento total del agua, un bullir de ranas en todas direcciones, una inquietud por todas las orillas y hasta los pájaros que dormían en las ramas umbrosas saltan disparados en bandadas por todo el aire azul. Muchas veces un pueblo duerme como el agua de un estanque un día sin viento, y un libro o unos libros pueden estremecerlo e inquietarlo y enseñarle nuevos horizontes de superación y concordia.
¡Y cuánto esfuerzo ha costado al hombre producir un libro! ¡Y qué influencia tan grande ejercen, han ejercido y ejercerán en el mundo!
Ya lo dijo el sagacísimo Voltaire: Todo el mundo civilizado se gobierna por unos cuantos libros: La Biblia, El Corán, las obras de Confucio y de Zoroastro. Y el alma y el cuerpo, la salud y las haciendas se supeditan y dependen de aquellas grandes obras. Y yo añado: todo viene de los libros. La Revolución Francesa sale de la Enciclopedia y de los libros de Rousseau; y todos los movimientos actuales societarios comunistas y socialistas arrancan de un gran libro, del Capital, de Carlos Marx.
Y sabed desde luego que los avances sociales y las revoluciones se hacen con libros y que los hombres que las dirigen mueren muchas veces como el gran Lenin de tanto estudiar, de tanto querer abarcar con su inteligencia. Que no valen armas ni sangre si las ideas no están bien orientadas y bien digeridas en las cabezas. Y que es preciso que los pueblos lean para que aprendan no sólo el verdadero sentido de la libertad, sino el sentido actual de la comprensión mutua y de la vida.
Federico García Lorca

domingo, 8 de abril de 2012

viernes, 6 de abril de 2012

UN CUENTO PARA EL VIERNES SANTO

LA SED DE CRISTO

Emilia Pardo Bazán

Cuando desde la altura de su patíbulo, abriendo las desecadas fauces, exhaló Cristo la más angustiosa de las Siete Palabras, María Magdalena, que estaba como idiota de dolor, estrechamente abrazaba al tronco de la cruz, se estremeció y, recobrando energía y actividad, a impulsos de una compasión que la penetraba toda, se lanzó en busca de agua que aplacase la sed del moribundo Maestro.
No muy lejos del Calvario, sabía Magdalena que manaba, entre peñascos, purísimo y cristalino manantial. Pidió prestada una taza de arcilla a un hombre del pueblo de Jerusalén, de los que en tropel rodeaban la cruz, y se encaminó hacia la escondida fuente. Poco tardó en encontrarla, sintiendo profundo regocijo al pensar que aquella linfa fresquísima calmaría, siquiera momentáneamente, los sufrimientos del mártir. Surtía el chorro, más claro que cristal, de una grieta tapizada de musgo y finos helechos, y el rumor de su corriente lisonjeaba el oído y el corazón. Al recoger en el cuenco de barro el agua, Magdalena notó que estaba fría, helada casi, y de nuevo se alegró, pensando lo refrigerante que sería para Jesús el sorbo. Con su taza rebosante corrió al lugar del suplicio, y a fuerza de ruegos logró que le permitiesen los sayones amontonar unas piedras y encaramarse hasta acercar el agua a los labios cárdenos del crucificado. Y cuando esperaba verle paladear el agua consoladora, he aquí que Jesús la rechaza, moviendo la cabeza y repitiendo en un soplo imperceptible: «Sed tengo».
Con la penetración del amor -porque en verdad os digo que no hay nada que ilumine el entendimiento de la mujer como amar mucho y de veras-, Magdalena adivinó que Cristo deseaba otra bebida más exquisita y rara que el agua natural, y era necesario traérsela a cualquier precio. Mientras se precipitaba hacia Jerusalén, iba recordando que el despensero y mayordomo del tetrarca Herodes la había obsequiado antaño con un falerno añejísimo, ardiente como fuego y dulce como miel, del cual una sola gota es capaz de reanimar un yerto cadáver. Suplicante y presurosa rogó la arrepentida a su antiguo galán, y como accediese a sus ruegos, volvió al Calvario radiante, escondiendo bajo su manto el ánfora de inestimable valor, y apoyó el pico en la boca de Jesús. Un movimiento más acentuado de repugnancia y un débil gemido donde casi expiraba inarticulado el lastimoso «Sed tengo», revelaron a la Magdalena que tampoco esta vez poseía el medio de calmar las torturas de la santa víctima.
En su desconsuelo y en su enojo contra sí misma por no haber acertado, reverdeció más y más en la Magdalena la memoria de su escandalosa juventud. Bien presente tenía que un patricio romano, epicúreo fastuoso, lector de Horacio y algo poeta, que por la hermosa hierosolimitana hizo mil locuras, solía hablar de los banquetes del Olimpo pagano y de la misteriosa virtud e incomparable esencia del néctar de los dioses, que infunde la felicidad e inyecta vida a oleadas en las venas exhaustas y en el cuerpo expirante. Y como si algún maléfico poder oculto -tal vez el de Satanás, empeñado hasta la última hora en tentar al Redentor para probar su divinidad- fuese cómplice del insensato anhelo de la pecadora, he aquí que se sintió arrollada y transportada con velocidad increíble en alas del viento, que la depositó suavemente sobre la cumbre de una montaña deliciosa, poblada de olivos, laureles, naranjos cuajados de azahar, que alternaban con boscajes de mirtos y rosales en flor, de embriagador perfume. Bajando airosamente la escalinata de un elegante templete de mármol blanco, salió al encuentro de Magdalena hermoso mancebo sonriente, de rizos color de jacinto y brillantes pupilas, y le presentó una crátera de oro maravillosamente cincelada, donde chispeaba un licor transparente, rosado, de fragancia embriagadora, que trastornaba los sentidos. Llena de gozo, Magdalena estrechó contra su pecho la sagrada ambrosía y sólo pensó ya en ofrecérsela a Jesús, porque era imposible que aquel licor glorioso, escanciado por Ganímedes, no arrebatase el alma del mártir, haciéndole olvidar sus dolores. Sólo con llevar la copa de ambrosía en las manos sentíase Magdalena presa de dulce fiebre y deliquio, y la Naturaleza le parecía más bella, el sol más claro y el aire más ligero, elástico y luminoso. ¡Desengaño cruel! Así que pudo acercar una copa colmada de ambrosía a los labios de Jesús, cuyos tendones estallaban y cuyo rostro descomponía un padecer horrible, el moribundo hizo un gesto de violenta repulsión, y licor y copa rodaron al suelo, derramándose sobre la seca tierra la bebida de los dioses paganos.
Entonces Magdalena, víctima de la tentación, sintió redoblar su amargura. Los resabios de los años de iniquidad resurgieron, porque el pecado deja sedimentos en el alma y sube a la superficie apenas lo remueve la pasión, y aunque la doctrina de Cristo había inflamado el espíritu de aquella mujer, faltaba todavía que la penitencia la purificase y destruyese la vieja levadura. Sucedió, pues, que Magdalena, ofuscada por el dolor de ver que no sabía estancar la sed de Cristo, se imaginó que el Cordero torturado, si rechazaba el falerno que halaga el paladar y la ambrosía que transporta la imaginación, tal vez aceptaría el vino de la venganza y de la ira; tal vez se aplacasen sus sufrimientos al gustar la sangre del enemigo que le clavó en la afrentosa cruz. Y con este pensamiento, Magdalena se acercó a uno de los sayones, el mismo que había fijado sobre la cabeza de Cristo la escarnecedora placa del Inri, y, engañándole, le llevó lejos del Calvario, a un lugar desierto, y aprovechando su descuido le hirió en el cuello con su propia espada, empapó la caliente sangre en una esponja y volvió segura de que Jesús bebería. Y esta vez, al contrario, fue cuando Cristo, con sobrehumano impulso, se irguió sobre los traspasados pies, y exclamó con fúnebre entonación: «Sed tengo.»
María Magdalena cayó al pie de la cruz, desplomada, retorciéndose las manos y arrancándose a mechones las rubias y sueltas guedejas. Su impotencia para aliviar la sed de Cristo la enloquecía, y principió a acusarse interiormente de su impura existencia, sintiendo sobre la frente humillada el rubor y la pena de tanta disipación, del seco erial de su conciencia, donde no tuvo asilo la piedad. Muchas noches, mientras ella derrochaba oro en su opulenta mesa y se reclinaba sobre tapices tirios y pérsicas alfombras, los pobres, a su puerta, esperaban como perros las migajas del festín, y las mujeres de bien, velándose el rostro, apresuraban el paso para no oír las risotadas y las canciones impúdicas. Por eso, sin duda, no podía disfrutar ahora el consuelo de aplacar la sed de Cristo, sed que neciamente creyó satisfacer con el vino de la gula, la ambrosía del placer o la sangre de la venganza. Y al recapacitar, ablandábase poco a poco el corazón de la pecadora, y subiendo a sus ojos el agua del arrepentimiento y de la humildad fluía de sus lagrimales, resbalando lentamente por sus mejillas. Era tanto lo que lloraba Magdalena, que parecía liquidarse su espíritu, y las lágrimas empapaban la ropa y los hermosos extendidos cabellos. Y como levantase los ojos hacia el rostro de Jesús, vio en él una súplica, un ansia tan viva y tan amorosa que, inspirada, juntó las manos y recogió en el hueco de ellas aquel sincero llanto de contrición, y alzándose hasta Jesús, lo llegó a su boca. Por primera vez, en lugar del acongojado «Sed tengo», Jesús respondió a la Magdalena abriendo los labios y bebiendo ávidamente, al par que transfiguraba su rostro una expresión de inefable dicha.


Tomado de: Noticuento; en CiudadSeva.com

martes, 3 de abril de 2012

EL HORARIO DE VERANO

Definitivamente no me gusta el horario de verano.
Soy una persona que no puede dormir temprano; siempre me ando desvelando. Pues ahora con más razón, porque tuve que adelantar (como todos) mi reloj una hora. Y la consecuencia lógica de esto, es que duermo menos, porque me tengo que levantar una hora antes.
Me había ya acostumbrado, de pocas semanas para acá, que me despertara el canto de una pajarito, como a eso de las 6 ó 6:15 de la mañana. Con sus trinos, que se esparcen por toda la zona, resulta muy edificante despertar. Pienso que es el ave que anuncia que el sol ya va a salir...
Y el pajarito ese sigue cantando en la mañana, pero ahora como a las 7 ó 7:15 por que él, estoy segura, sigue verdaderamente al sol, y anuncia su salida, sólo que ahora ¡una hora más tarde! porque a nosotros, seres humanos, se nos ocurrió adelantar una hora nuestros relojes.
No, no me gusta el horario de verano.







Imagen tomada de: quo.es

lunes, 26 de marzo de 2012

EL OCIO CONSPICUO

Yo no había oído hablar de Thorstein Veblen , hasta que, mirando por ahí, me encontré una Antología editada por SEP/UNAM llamada "Pensadores Norteamericanos del Siglo XIX" en la que se puede leer a Thomas Jefferson, Benjamin Flanklin, Abraham Lincoln o Edgar Allan Poe entre otros, y obviamente a este Thorstein Veben.
Me puse a buscar su biografía y encontré datos interesantes sobre que era economista y sociólogo estadounidense, fundador de la corriente institucionalista norteamericana junto con John R. Commons.
¿Y por qué escribo sobre este hombre?
Pues simplemente porque encontré un pequeño ensayo de él que se llama "El Ocio Conspicuo" en donde habla del trabajo productivo, de las clases trabajadoras, de clases inferiores y superiores y el que trabajar sea o no deshonroso. Y justamente en torno a la clase pecunaria superior habla sobre el requerimiento de abstenerse del trabajo productivo... ya que durante la fase de la cultura predatoria el trabajo viene a asociarse mentalmente con la debilidad y la sujeción a un amo. Es, por lo tanto, una señal de inferioridad y llega a tomarse por indigno del hombre en su mejor estado. Debido a dicha tradición se siente al trabajo como degradante... Y sigue así explicando hasta que llega al concepto de "Ocio Conspicuo".
Entendí, leyendo a este economista que el mostrar riqueza aparejada con el "no trabajar", con el andar de ocioso, da respetabilidad.
Interesante, muy interesante el concepto y cómo lo desarrolla.
Pero tanto o más interesante es la palabra "conspicuo".
Ésa si la había oído, pero no me había detenido en su etimología y real significado: lo conspicuo es lo ilustre, visible, sobresaliente, lo famoso o lo insigne, notable o renombrado.
Y no ser conspicuo(a) es ser un desconocido, un vulgar cualquiera, un invisible social (según leí por ahí).
Y si a ello le agrego el concepto del trabajo productivo y del ocio...
¿Qué será mejor?, ahora me pregunto, ¿ser trabajador productivo? ¿ser ocioso?
El mismo Thorstein Veben me dio la respuesta: "En sí misma y en sus consecuencias la vida de ocio es hermosa y ennoblecedora a los ojos de todos los hombres civilizados..."
Nada más que ahora me pregunto ¿y de qué me voy a mantener...?

domingo, 25 de marzo de 2012

CÓMO HACER CRECER LA DICHA

Paso 1:
Plántate profundamente en un cuadro de fe, cúbrete sólida y firmemente. Riégate todos los días con pensamientos positivos y mantente en la saturación debida. Ponle con frecuencia el abono del perdón, porque te ayudará a crecer.
Elimina rápidamente las semillas de la preocupación para que no germinen, y arranca las malas hierbas de la desesperanza. Alimenta con esperanza los desalientos, según se necesite, y mantente siempre en la frescura y la sombra cuando sientas irritación o calor. Poda la culpa o la depresión, porque crean deterioro, y cultiva con recuerdos dichosos cada día.

Paso 2:
Cosecha las lecciones del pasado; cava, elige y limpia la azada. Alimenta las raíces del presente, porque ahora es cuando florecerás y crecerás. Empieza a plantar para el futuro; pon tus objetivos en una hilera. Laya bien el cuadro con la pala para que todos tus sueños puedan crecer.

Paso 3:
Recuerda que la pena es un predador natural, por lo tanto aprende a tolerar cierto nivel de daño. Protege tu jardín con rezos cotidianos. Entierra la crítica y las quejas, porque son plagas dañinas.
Planta la semilla del amor por donde vayas porque la alegría, el amor y la risa de seguro crecerán. Si bien las espinas de la vida tal vez perdurarán, germina una sonrisa por el camino... ¡y agradece lo que tienes hoy!

Michelle Rossi

martes, 14 de febrero de 2012

14 DE FEBRERO

Sinceramente, nunca había yo visto a tanta gente con regalos en las manos: globos, bolsas, osos de peluche, dulces, chcolates, macetas con flores vivas, flores distintas en ramos hermosos o solamente envueltas en celofán con algún listón.
Ni siquiera había visto esto en la Navidad.
Aunque la mayoría de los que llevaban los regalos eran jóvenes. Y digo la mayoría, porque había gente de cualquier edad con algo (regalo) en las manos. Ya sea que lo fuera a dar o lo hubiese recibido; eso es lo de menos.
Y dos regalos me llamaron la atención:
1) a media tarde, rumbo a la escuela, sin tanto calor, pero con un entorno muy despejado que permitía ver los cerros del Ajusco, ya plagados ahora de casas y enmarcados por un azul de cielo y blanco de nubes que contrastaban fuertemente con lo pardo de los cerros, apareció, hacia otro rumbo del horizonte y sólo por efecto de la curva que la micro tomó, ahí a lo lejos una hermosa imagen: el Iztlacíhuatl, todo nevado, blanquísimo y cerca, muy cerca a la vista. Hoy la naturaleza nos regaló a todos los capitalinos que lo quisiéramos ver, una imagen ya poco vista de un hermoso volcán. Yo lo agradecí.
2) caminando ya en la noche, hace poco rato, por las calles de mi casa, ví a una pareja joven, caminando y platicando animadamente. Ella llevaba en sus manos ¡siete globos!, además de una bolsa de papel con algo adentro; y él cargaba un oso de peluche tamaño gigante en un color claro (blanco no era). Yo pensé que seguramente se quiere mucho esta pareja y por su juventud se demuestran así su amor.